La cita más importante de tu vida

A ver, recapitulemos… 

Miércoles 14 de mayo del 2014. 

Mi ginecólogo ha decidido programar mi parto para este día. Llevo demasiado tiempo sin poder dormir por culpa de unos dolores de espalda que no hay manera que se me vayan. Según todas las pruebas y exámenes que me han hecho, la pequeña está en plena forma y lista para salir. Me voy a ahorrar el contaros detalle a detalle como fue el parto.. tan solo deciros que tuve tiempo suficiente para jugar al Candy Crush y pasar ese maldito nivel que no había manera de pasar, comentar todas las fotos de Instagram de mis contactos, hacerme selfies en la sala de parto, arreglarme el pelo para el "gran momento", y chatear con todas mis amigas que desgraciadamente no podían estar ese día a mi lado…

Más o menos… así estaba yo antes de dar a luz.. 

Tomando fotos de la sala de parto… Tras más de 10 horas así… me conocía todos los productos de memoria. 

La máquina de la derecha va imprimiendo las contracciones, es impresionante cuanto rollo tiene, no se gastaba nunca. La cunita de la niña ya preparada para cuando llegase. 

Jueves 15 de mayo 2014. 

Son las 11h50 de la mañana e Isabella llega a este mundo! No puedo describir con palabras lo que sentí, y creo que pocas madres podrían hacerlo. Tras horas y horas de larga espera, llega a este mundo mi hija, y de repente, te olvidas de todas esas horas pasadas en la sala de parto, de todos esos dolores de espalda, nervios, ansias… todo se olvida en el momento en el que te conviertes en madre.  

Durante los próximos minutos que siguen al parto, tan solo ves a gente de un lado a otro. A tu bebé se lo llevan de aquí para allá y de vez en cuando te vienen a decir "que bonito bebé" y ala… que se lo vuelven a llevar. Tu sigues con las piernas abiertas de par en par mientras el ginecólogo termina "la obra maestra", obra que NO os aconsejo miréis con un espejo … fiaros de lo que hace y no preguntéis mucho!.

Os dedico unas fotos divertidas, que seguro os harán reír…

¿Como dices que me vas a llamar?

A ver si me entiendes… jamás volverás a dormir del tirón… 

Y no… no llegan así, algo de esfuerzo tenéis que hacer!

Es cursi, lo sé, pero debo decir que sí que es el día más bonito de una mujer. Tu cuerpo ha creado este bebé tan inocente que ves ahora. Jamás nada podrá superar la alegría y felicidad que sientes al tener a tu bebé en tus brazos. (Bueno.. no lo superará pero un par de Jimmy Choo y un Birkin de Hermès puede añadir más alegría al tema…te has pasado 9 meses sin ir de compras… un caprichito no te irá mal…). 

Yo disfruté cada mañana de mi desayuno en la cama, sabía que esto de pronto se acabaría. 

Os he preparado mis indispensables para vuestra estancia en la clínica. No os olvidéis el cargador del móvil… Esto es como un vuelo Barcelona - Sydney ida y vuelta dos veces! 

Disfrutad de cada instante del momento de dar a luz. Insultar a quien queráis porque al fin y al cabo… es vuestro día, y se os perdonará absolutamente todo! 

(Y por cierto.. lo de preparar la maletita dos meses antes por si las moscas es una CHORRADA… no os estreséis con estas cosas porqué en la clínica tienen de todo, y lo que no tengan se lo mandáis a comprar al marido, madre, suegra, o quien sea.. que tanta visita tiene que servir para algo no?).